jueves, 15 de octubre de 2009

ME ACUERDO

Ese día en Monterrey, era un tarde nublada, seca, árida, gris, las hojas de los pocos árboles que había en las calles se detenían secas ya, muertas, se detenían como las esperanzas que suelen quedar tras perder la fe... sabiéndose muertas, sin futuro, pero aun esperando una mejor suerte...

Esa tarde la inmensa palabra fue silencio…

Había entre los árboles un grave misterio…

El sonido durmió, el color había muerto y mudo el eco quedo…

El aire estaba vació... el aire vació es como una expiración, como la ultima expiración antes de morir, se siente en ella la muerte... la muerte que ha invadido tu cuerpo... como morir sin muerte…

Era un día aun más gris que los anteriores, aun más seco, más inerte... ese día me he enterado... por fin lo he sabido... me has dejado... en vano quería saberlo… ya lo presentía... tan raro… tan obscuro… aun chispa mis nervios y eriza mi piel, pasando ahora mismo tan solo el recuerdo, como si el rostro me hubiera rozado el ala peluda de un horrible murciélago…

Tiempo después nos topamos... y te apenas.

Ven mi amada, inclina tu frente en mi pecho, no hablemos, callemos… como dos chiquillos que tiemblan de miedo…

-¿Te acuerdas de cuando éramos chiquillos?

-¿te acuerdas como caminábamos juntos por la calle tomados de la mano, te acuerdas?

-¿te acuerdas cuando íbamos al parque, te acuerdas?

-¿te acuerdas de los momentos que compartíamos juntos todas las tardes, te acuerdas?

-nos pasábamos todo el día pensando el uno en el otro, esperando que llegara la tarde para vernos y estar juntos... ¿te acuerdas cuanto y como lo deseábamos?

-Y aquel día que planeamos ir a Saltillo... no pensamos en las consecuencias ¿te acuerdas de la regañiza que te dieron?

-Y el día domingo lluvioso que fuimos al cine... el lodo estaba tan inmenso y tu tan bella... ¿te acuerdas como te sostuve entre mis brazos para que tus pies no tocaran el lodo?... mira... todavía tengo la silueta de tu cuerpo entre mis brazos... obsérvala… mírala...

-¡No me estas haciendo caso.……!

-Te acuerdas cuando fuimos.……


-¡Si... me acuerdo... me acuerdo... me acuerdo……!

-Es tarde ya… si; muy tarde… demasiado- dijo ella…

-Cerró sus ojos, y una lágrima resbaló por su mejilla.

4 comentarios:

  1. orale carnal, conmadre tu relato. me hiciste recordar mas anecdotas, puro romanticismo inspiracion de muchas tardes y noches.
    saludos mi estimado y gracias por tus comenmtarios.

    ResponderBorrar
  2. No se que decir.
    Es lindo pero muy triste !

    ResponderBorrar
  3. Que lindo escribes, te felicito.

    Saludos.

    ResponderBorrar